Esta semana queremos hablaros acerca del término brocha seca ¿lo conocéis? Este término hace alusión a una técnica de pintura a la que se suele recurrir normalmente para decorar muebles.
A través de la técnica de brocha seca, conseguiremos un aspecto envejecido en los muebles de nuestro hogar ya que la pintura que utilicemos no se repartirá de manera uniforme por la superficie de los mismos. Lo que sí debemos tener en cuenta, es que la cantidad de pintura a utilizar debe ser mínima. Así algunas zonas quedarán más cubiertas que otras, dándole ese aspecto tan especial.
Antes de ponernos manos a la obra, hay que preparar el mueble que queramos envejecer. Lo principal es lijar los posibles salientes o desperfectos del mismo hasta que consigamos un aspecto más liso. Después, aplicaremos una primera capa de pintura para que cubra totalmente la superficie. A continuación, en la segunda capa retiraremos el exceso de pintura de la brocha con un trapo o papel y se extiende solo con las cerdas, que han de rozar el mueble con movimientos rápidos.
Cuando la brocha empiece a cargarse demasiado, el exceso de pintura en el mueble se puede retirar con un trapo o esperar a que seque y aplicar otra vez la pintura siguiendo los mismos pasos.
Nosotros te recomendamos como pinturas más adecuadas, aquellas que son acrílicas o al aceite. Y respecto al tamaño más adecuado para la brocha, dependerá en gran medida de las dimensiones de la superficie del mueble. Para aquellas zonas más difíciles, sería conveniente recurrir a modelos biselados.
